Escuchar al cuerpo es volver al mundo
La palabra soma, del griego, significa del cuerpo o cuerpo entero, no dividido. El cuerpo no es solo de músculos, articulaciones o sistema nervioso. Se trata de una totalidad de mundos encarnada: percepción, memoria, relación, deseo, defensa, vínculo, territorio… venas, células, heces, fluidos, huesos…
Frente a una cultura que fragmenta, medicaliza y estetiza el cuerpo, la práctica somática es un acto de reunificación y responsabilidad. Un compromiso con el sentir sensible, pero también con comprender que el cuerpo no es un ámbito desafectado del mundo ni apolítico: está atravesado por cultura, clase, raza, historia…
En lo concreto trabajamos en consulta los abordajes somáticos desde: La Neurocepción, el movimiento y cultivo de la presencia.
No buscamos "estar presentes" para rendir más, ni para ser más aceptables ni más productivas.
El trabajo somático nos ofrece la posibilidad de habitarnos y cultivar un estado de presencia y sensibilidad despiertas.
Un estado de escucha no empieza ni termina en el propio cuerpo. Cuando cultivamos el hábito de escuchar desde dentro, también empezamos a volvernos más sensibles y permeables al mundo que nos rodea.
La práctica de la escucha somática afina nuestra percepción, y esa apertura transforma la manera en que habitamos la vida. Ya no percibimos desde la separación, sino desde una presencia más porosa, donde el cuerpo deja de ser un límite y se vuelve un lugar de relación con la otra, los ríos, las tierras y las visiones que nos resultan ajenas.
No hace falta haber vivido un trauma individual extremo para estar traumatizadas.
Vivimos en sistemas que se sostienen sobre el dominio de cuerpos, la explotación y el miedo a la diferencia.
Nuestros cuerpos y nuestros sistemas nerviosos se han formado en relación constante con estructuras violentas: colonialismo, racismo, machismo, capacitismo, extractivismo, clasismo…
La violencia estructural moldea nuestras respuestas nerviosas y vinculares: se cuela en la forma en que trabajamos, comemos, descansamos, nos relacionamos.... La mayoría de nosotras estamos atrapadas entre dos grandes formas de respuesta colectiva:
Hiperactivación: aumento del control, violencia, intolerancia a la diferencia, conservadurismo emocional y político. Fascismo, racismo, “normalización” del castigo. Es la lógica de eliminar lo que se siente amenazante ( no lo necesariamente lo que lo es).
Hipoactivación o colapso: disociación, desconexión, agotamiento, sumisión al ritmo de la productividad. Nos volvemos cuerpos funcionales, disponibles, anestesiados.
El objetivo del trabajo somático no es “calmar” ni eliminar las emociones.
No buscamos anestesia ni adormecimiento. Queremos poder sentir el miedo, el dolor, la rabia, el placer y el deseo sin quedar atrapadas en ellos, ni usarlos para dañarnos a nosotras mismas o a otras.
Pero esto requiere condiciones.
Y la principal es el tiempo.
Mientras sigamos siendo explotadas por el mercado y el poder* será desafiante y complejo poder sentir. (si bien ya lo es ). Porque sentir necesita espacio, lentitud, ritmo orgánico. Y esos ritmos no caben en el calendario del rendimiento.
La lógica de la productividad ha conquistado incluso nuestros inconscientes: muchas veces pedimos resultados también en terapia. Pero los procesos reales no van al ritmo del resultado. Van al ritmo de lo viviente…
Nuestro mundo - Molly Malone
Estar presentes en el cuerpo no es un acto abstracto. Es un proceso biológico, sensible y concreto.
El cuerpo —el soma— registra todo lo que vivimos a través de sus sistemas de percepción, integración y respuesta.
El sistema nervioso autónomo regula muchas de nuestras funciones internas (respiración, digestión, ritmo cardíaco) de forma involuntaria. Pero está en comunicación constante con el sistema nervioso central y con nuestras experiencias externas. Lo que percibimos se traduce en sensaciones internas y la forma en la que sentimos modifica nuestra forma de percibir.
De algunas de nuestras referentes. Como Deb Dana, Gabor Maté, Abigail Rose Clarke… (Recuerda que puedes activar subtítulos en tu idioma en Youtube)
Nos explica a través de una inusual meditación guiada como funciona nuestro sistema nervioso.
Nos explica de un modo directo y resumido qué es el trauma
Nos presenta el concepto Ecotono y la importancia de volver a casa, a nuestros cuerpos.
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